Fontana

Homenajeando a Franc Fontana, antiguo colaborador del Estudio Arola, esta papelera se concibe como un elemento funcional y a la vez estético, cuya forma revela su función. Su amplia abertura circular incita al depósito de desechos, con un contenedor en forma de saco que se va metamorfoseando hasta configurar la línea de apoyo de la base. Así, la transición entre el círculo y la línea constituye el depósito. La base lineal favorece la optimización del espacio haciendo innecesarias unas patas de apoyo. Realizada en fundición de aluminio con estructura de acero inoxidable, su perfil recuerda al de una copa cuyo cuerpo está formado por la unión de dos piezas. La apertura a la italiana, desde un sólo lado, facilita el vaciado. Esta particularidad estructural permite tanto la presentación alzada (de doble cara) como mural (de una sola pieza), favoreciendo una gran versatilidad de instalación.